Mi hijo se porta mal en el colegio: ¡Se porta mal en el colegio! 6 claves para actuar en casa

Mi hijo se porta mal en el colegio: ¡Se porta mal en el colegio! 6 claves para actuar en casa

¿Qué puedes hacer si tu hijo no se comporta bien en la escuela?

Es posible que te hayan llamado de la escuela de tu hijo, que te hayan puesto una nota en la agenda o que directamente haya sido el tutor o tutora de tu hijo/a quien te haya llamado para decirte que el comportamiento de tu pequeño no está siendo el correcto y que no sólo molesta a los compañeros, sino que además, interfiere en el ritmo normal de la clase, ¿te resulta familiar todo esto? ¿Qué puedes hacer si tu hijo no se comporta bien en la escuela?

Analiza qué está ocurriendo

Lo normal es que quieras que tu hijo se comporte bien en la escuela y que sea un buen ejemplo, que los maestros estén contentos y que no sólo las notas sean buenas sino que además puedas comprobar que su inteligencia emocional también es la adecuada. Pero parece que en este caso, esto no es así.

En todos los casos (absolutamente en todos) el mal comportamiento siempre tiene una razón que se esconde, por lo que si tu hijo no se comporta bien en clase es muy probable que exista algún factor emocional que le está haciendo comportarse de este modo. Quizá quiera llamar la atención, ser aceptado por los compañeros o simplemente sentirse mejor por culpa de un sentimiento negativo que no le deja tranquilo. Es posible que sea una enfermedad, inseguridad personal, un problema en casa, algún trauma, problemas familiares… y el niño sólo encuentra este modo para expresar su ira, su miedo o su frustración, porque no conoce otro en este momento. Intenta hablar con tu hijo en primer lugar para averiguar desde su punto de vista, qué está ocurriendo.

Habla con todos los profesionales del centro que atienden a tu hijo

El siguiente paso será reunirte con los profesionales que atienden a tu hijo en la escuela y saber su punto de vista. Que te expliquen qué ocurre, cuál es su comportamiento y sobre todo, saber cuáles son las consecuencias o medidas que toma la escuela en cuanto a su comportamiento. Es necesario que estés de acuerdo con ese tipo de represalias (en el caso de que las haya). Entre todos tendréis que buscar la manera de frenar este asunto. Pero cuando digo frenar este asunto no me refiero a castigar únicamente o a tomar represalias por el mal comportamiento, sino que todos os pongáis en los zapatos de ese niño para saber por qué está comportándose de ese modo, buscar la raíz del problema, solucionarlo e intentar que mejore su comportamiento teniendo en cuenta las emociones y sus sentimientos.

Pero también habrán consecuencias

Dejando de lado a los castigos, deben haber consecuencias al comportamiento negativo del niño tanto en casa como en la escuela. Pero para que las consecuencias tengan sentido y se consiga mejorar el comportamiento, previamente se deberá haber halado con el niño para explicarle que su comportamiento no es adecuado y entre todos buscar una tabla de consecuencias pactadas para que él sepa que su comportamiento tiene consecuencias (acción-reacción). De este modo, al saber cuáles serán las consecuencias y saber qué es lo que se espera de él, tendrá la oportunidad de poder controlar su propio comportamiento y entre todos (y también del niño) se podrán conseguir grandes mejores.

No lo puede hacer solo

Tu hijo no puede hacer esto solo y necesita motivación, apoyo y orientación en todo el proceso… deberás ayudar a tu hijo a superar ese mal comportamiento. No le etiquetes negativamente y empieza a hacerle ver todo lo bueno que tiene en su interior. Es necesario que aprenda buenos comportamientos, y si crees que no puedes ayudarle, entonces deberás buscar la ayuda y el apoyo de un profesional.

Mi hijo de 5 años se comporta mal en el cole ¿Qué puedo hacer?

Todos los días tengo notas en la agenda de mi hijo. La maestra dice que se porta mal, que molesta a los demás niños, que es muy movido, que no para y se pasa todo el día castigado, incluso sin recreo. Ya no se qué hacer, por más que le reprenda en casa él sigue igual.

Esta es una de las cuestiones que algunos papás me han hecho llegar, vía comentarios en el blog, vía e-mail o a través de las redes sociales (facebook y twitter), y a la que intentaré dar respuesta mediante este artículo.

La verdad es que cuando nos llaman la atención por el mal comportamiento de nuestro hijo en el colegio no suele ser un plato de buen gusto para ningún padre, porqué normalmente no estamos preparados para que nos informen que nuestro hijo es uno de «los malotes» de la clase.

Siempre solemos pensar o creer que nuestro niño es un niño bueno y sufrimos por si alguien le puede estar molestando o ser objeto de burlas de los demás. Pocas veces, en pocas ocasiones ratificamos lo que los maestros nos dicen sobre nuestros hijos como por ejemplo que es un niño movido, «chinchón», «molestón» o incluso un niño al que le faltan límites porqué no obedece ninguna norma. 

Es cierto que algunos niños se comportan de un modo totalmente diferente en casa que en el colegio, al igual que lo hacen cuando están con sus abuelos o con otras personas.  Pero por norma, los niños a los que hago referencia en esta entrada, son niños que tienen dificultades en seguir las reglas, es decir que en casa probablemente tampoco las respeten.

Cuando nos llaman la atención por las conductas disruptivas de nuestro hijo en el cole es importante que nosotros, los padres, sepamos cómo manejar este mal comportamiento de nuestros hijos.

¿Qué son las conductas disruptivas en el aula? ¿Que significa un mal comportamiento en clase?

Las conductas disruptivas son todas aquellas conductas que impiden llevar el ritmo de clase, que obstaculizan el trabajo de la maestra o maestro y que interfieren en el proceso de aprendizaje de los demás niños.

Entre las muchas conductas que podríamos considerar como mal comportamiento en clase quiero destacar las siguientes:

  • hacer ruidos corporales (risas, toses, eructos, silbidos, gritos, ecos, …)
  • hacer ruidos con objetos (golpear la mesa, tirar cosas, tamborilear con el lápiz, hacer sonar alarmas,…)
  • levantarse constantemente del sitio,
  • deambular por la clase,
  • interrumpir constantemente el ritmo de clase con preguntas,
  • salir y entrar de clase sin permiso,
  • proferir insultos contra compañeros,
  • decir palabrotas, frases soeces ,
  • burlarse de los compañeros,
  • quitar cosas a compañeros,
  • amenazar a compañeros,
  • agredir a compañeros,
  • estropear (pintar, escribir, romper) los materiales de compañeros,
  • estropear (pintar, escribir, romper) los materiales comunes,
  • negarse a hacer lo que dice el profesor,
  • desafiar al profesor,
  • amenazar al profesor,

En ocasiones el mal comportamiento se debe a una falta de adaptación del niño la escuela. Este primer punto es importante porque no todos los niños que tienden a comportarse mal son niños mal educados, consentidos y sobreprotegidos como apunto en el próximo párrafo. De modo que antes de nada debemos considerar este punto y preguntarnos si el niño en cuestión acaba de mudarse de casa, cambiar de colegio o incluso se encuentra en un nuevo país.

Dicho esto, el mal comportamiento en clase en otras ocasiones sí es el fruto de un niño que crece totalmente consentido y sobreprotergido por sus padres, un niño que vive sin límites ni normas, donde él hace lo que le apetece en todo momento sin que nadie le diga no. 

También es cierto que este tipo de conductas además son propias de niños que viven bajo el techo de unos padres despreocupados por la conducta de sus hijos, padres que creen que los niños deben aprender solos, que no les toca a ellos disciplinar y que si el profesor no puede con un niño de 5 años es porqué es un incompetente.  

Pero la verdad es que somos nosotros, los padres, quienes debemos educar a nuestros hijos para que entiendan lo importante que es comportarse bien, qué es lo que se espera de ellos y por qué está mal hacer determinadas cosas como por ejemplo molestar o chinchar a los compañeros.  

Los padres debemos saber encontrar el punto de equilibrio para poder educar con cariño y disciplina y evitar que el mal comportamiento de nuestros hijos se nos escape de las manos por sobreprotección (pensar que aún es muy pequeño, es normal que haga esto) o por negligencia (no poner límites ni normas, dejar hacer sin más).

¿Qué hacer si mi hijo se porta mal en el cole?

Si como padres nos preocupa (como suele ser lo normal, lo lógico y lo esperable) que nuestros hijos aprendan a comportarse de un modo responsable dentro y fuera de casa debemos enseñarles primero a hacerlo cuando están con nosotros. Es decir, el buen comportamiento se aprende en casa, somos nosotros los padres los responsables de la educación de nuestros hijos quienes aprenden por imitación, por el ejemplo que les damos y con las normas y limites que fijamos.

No podemos esperar que nuestros hijos se comporten bien en el colegio si en casa nos faltan constantemente el respeto y no obedecen ninguna norma. Si no son responsables, respetuosos, disciplinados, … con nosotros es poco probable que lo sean en otras circunstancias o que obedezcan a otras figuras de autoridad.

Cuando nos llaman la atención del cole por el mal comportamiento de nuestro hijo podemos seguir estos consejos para poner remedio a esta situación:

  • Hablar con el maestro o profesor de nuestro hijo para que nos explique realmente qué es lo que hace, de qué modo exactamente se porta mal y cuando lo hace. Es importante tener una actitud abierta para escuchar con detalle todo lo que la maestra/o tiene que decirnos.
  • Hablar con nuestro hijo y explicarle lo que sucede.
  • Permitir que nuestro hijo se explique, aunque al principio niegue la mayor e intente mentirnos o excusarse de mil modos habidos y por haber.
  • Explicar a nuestro hijo, con calma, sin gritos qué es lo que esperamos de él en casa y en el colegio. Dejarle claro que hay ciertas conductas que no le permitiremos y que éstas tendrán unas determinadas consecuencias negativas.

Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *