El nombre femenino que trataremos a continuación destaca por su personalidad cauta y astuta. Gabriela mide meticulosamente cada una de sus decisiones, y por eso siempre suele conseguir lo que se propone. Si estás pensando llamar así a tu hija o simplemente quieres saberlo todo sobre ella, no te pierdas esta información sobre el origen y el significado de Gabriela.
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Como sucede con la mayoría de nombres antiguos, su significado está muy relacionado con la religión y la fe: «La energía de Dios».
Cuando analizamos la personalidad de Gabriela, nos encontramos con una mujer sosegada, que elige su camino con cautela. No soporta los giros inesperados de la vida, así que evita tomar cualquier tipo de riesgo para no sufrir las consecuencias de cometer un error. De ahí que tarde tanto en decidirse, aunque esto es una gran ventaja porque a la larga acaba teniendo éxito.
En lo que respecta a su trabajo, Gabriela posee una gran capacidad de imaginación, además de que se esfuerza por cumplir con todas las exigencias de sus jefes. No obstante, aunque tenga mucha imaginación mantiene su actitud reservada, ya que no quiere precipitarse ni fracasar. También prefiere no tener un puesto de demasiada responsabilidad, sino seguir las indicaciones de su jefe, es un modo de sentirse protegida. Tiene muy buena relación con el resto de su grupo, por lo que es bastante feliz en este aspecto de su vida.
En sus relaciones amorosas, a Gabriela le encanta sentirse amada y protegida por su novio, del mismo modo que ella le demuestra su amor día tras día. No obstante, su personalidad cambia radicalmente y en este sentido deja apartada la cautela para dejarse llevar por sus sentimientos y su instinto, por lo que cuando tiene dudas sobre su relación o piensa que le están engañando, puede llegar a crear grandes problemas que enfríen la relación.
Lo más difícil es lograr que entre en razón, por ello es necesario que su pareja tenga mucha paciencia y que aprenda a tratar con ella.
Con sus amistades, Gabriela vuelve a adoptar su postura de cautelosa. Debido a esto, ellos le admiran, ya que sabe darles consejos muy acertados.
Existe un dilema en cuanto al origen de este nombre femenino, ya que muchos creen que sus raíces se encuentran en el latín. Sin embargo, su etimología en realidad se esconde en el hebreo, concretamente en la palabra גַּבְרִיאֵל.
Como decía al principio, este apelativo tiene muchos matices religiosos, pero no solo en su significado, sino que también aparece en numerosas ocasiones en textos bíblicos.
Si el bebé que vas a tener es un niño, puedes llamarle con el nombre Gabriel.
La fecha señalada para el santoral de este nombre es el 27 de febrero.
Aquí tienes algunas formas análogas de este nombre en otras lenguas:
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