Niña ecografia 12 semanas: Cómo se distinguen los genitales de un niño

Niña ecografia 12 semanas: Cómo se distinguen los genitales de un niño

Cuando te dicen que es una niña o un niño y en la siguiente ecografía te llevas la sorpresa de tu vida

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Liliana Guerra
@aBeautyHealthy

Siempre me ha llamado la atención todo lo que empieza a girar alrededor de un embarazo cuando una incipiente barriga ya no puede ocultarlo más: los comentarios de si estás más guapa (o no, que también hay quien lo dice), los consejos que empiezan a llegar a borbotones, y de forma muy especial, los augurios de todos aquellos que tienen el súper poder de adivinar si lo que esperas es un niño o una niña, tan solo verte con el primer vestido premamá.

Yo no me libré de eso. De hecho, fue una de las primeras sorpresas que me llevé cuando llevar ropa premamá se hizo obligatorio: familia, amigos y desconocidos sentenciaron que esperaba un niño gracias a la “forma puntiaguda” de mi barriga y yo, embarazada primeriza y con muy pocos conocimientos sobre las creencias que años de tradición se han encargado de afianzar en el ideario, empecé a creer lo que me decían.

En la ecografía de las 12 semanas el ginecólogo confirmó lo que “todo el mundo ya sabía”: era un niño y estaba todo bien. Su padre, que también se había dejado llevar un poco por la emoción de saber que su mejor compañía para desempolvar los Scalextric venía en camino, celebró la noticia como si de un mundial de fútbol se tratase.

Pero las ecografías también pueden fallar

Sí, las ecografías y los ojos clarividentes de todas aquellas que han parido (y de los que no), también se equivocan. En la segunda ecografía un “la niña está perfectamente” nos dejó helados. Tal vez si nos hubiesen dicho que eran dos nos habíamos sorprendido menos.

Aún recuerdo la cara de mi marido. Enfadado con el mundo por haberle hecho ilusionar con la llegada de su tan anhelado partner in crime, no atinó a mediar palabra. Confieso que en ese momento, aunque muy sorprendida, por supuesto, mi corazón latió más fuerte que nunca: mi niña venía de camino y en medio de toda la confusión, me sentí aún más feliz. Juro que hasta ese momento me daba igual lo que fuese, pero a partir de ahí ya no me cambiaba por nada del mundo.

Y fue lo mejor que nos pudo haber pasado jamás

Yo sabía que la llegada de nuestra pequeña iba a cambiar nuestra vida y que su padre se enamoraría hasta los huesos de ella (el enfado le duró menos de una hora, en realidad). Estoy segura de que si hubiese sido un niño la cosa habría sido igual, pero esa confusión nos hizo plantearnos de forma muy distinta algunas cosas como por ejemplo la elección del nombre -que a la familia no le gustó, dicho sea de paso-, y por supuesto la forma en la que nos tomaríamos los comentarios de todas las personas que opinaban de todo lo que tuviese que ver con el bebé. Fue un gran giro de guion, no lo puedo negar, aunque en la siguiente ecografía volvimos a preguntar si era niño o niña, por si acaso.

Imagen de prostooleh en Freepik

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Cuando te dicen que es una niña o un niño y en la siguiente ecografía te llevas la sorpresa de tu vida

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Ecografía de las 12 semanas ¿Y si sale mal?

Todas las mujeres embarazadas sin excepción esperamos con ansia la ecografía de las 12 semanas del embarazo. Será la primera vez que veamos a nuestro bebé, pero ¿Qué vamos a ver? ¿Y si sale mal? ¿Me dirán si el bebé es niño o niña?

Bueno, ver… lo que se dice ver… se ve más bien poco. Una mancha blanca con forma de mini bebé en una pantalla negra. Lo de decirte si es niño o niña pues depende de las ganas que tenga la persona que te hace la eco de adivinar.

Digo adivinar porque en realidad es demasiado pronto para verlo claramente y no deberías fiarte mucho de lo que te dicen. Mi hija fue un niño hasta la semana 22 , que de repente eso que tenía entre las piernas ya no era un pene si no una mano.

Las ecografías son un método de control del embarazo muy importante. Cómo sabéis el embarazo consta de 40 semanas. En un embarazo normal , que no sea de riesgo , en la sanidad publica suelen hacerse 3 ecografías, una por trimestre.

  • Ecografía del primer trimestre (ecografía semana 12)
  • La ecografía del segundo trimestre o ecografía de las 20 semanas, llamada » la morfológica «
  • Ecografía del tercer trimestre, se realiza normalmente a las 35 semanas.

En la ecografía del primer trimestre vas a tener que esperar un rato porque primero miran lo que tienen que mirar y luego ya te enseñan. Pero todavía se me ponen los pelos de punta al recordar el sonido del latido del corazón. Qué llorera madre…

Foto de una ecografía de la semana 12 de embarazo
Autor: PublicDomainPictures

Pero más allá del sentimentalismo durante esta ecografía se analizan una serie de parámetros, como la translucencia nucal, el hueso nasal o el flujo sanguíneo fetal. Estos parámetros determinan el riesgo del feto de padecer Síndrome de Down y otras patologías cromosómicas,

La ecografía de las 12 semanas es fundamental para diagnosticar posibles trisomías u otras anomalías en el desarrollo del feto.

Una trisomía es la existencia de un cromosoma extra en un organismo.

Las trisomías más frecuentes en humanos son:

  • Trisomía 21 (síndrome de Down)
  • La Trisomía 18 (síndrome de Edwards)
  • Trisomía 13 (síndrome de Patau)
  • La Trisomía 8 (síndrome de Warkany 2)

De éstas, las trisomías 21 y 18 son las más comunes.

¿Qué es lo que van a mirar en la

ecografía del primer trimestre?

La ecografía de las 12 semanas en realidad se hace entre la semana 11 y la 14 de embarazo, dependiendo de la disponibilidad de las citas y se realiza de manera vaginal. Forma parte del triple screening en el que se evalúa también la edad de la madre (el riesgo incrementa con la edad de la madre) y los niveles de dos proteínas fabricadas por la placenta (beta-hCG libre y PAPP-A).

Aquí os dejo un vídeo explicativo de todo lo que se mira en la ecografía del primer trimestre.

Por norma general el profesional que hace la ecografía no emite diagnósticos, así que te dirá que está todo bien o que ya tu ginecólogo te dice.

Si hay algo mal, después de la eco es posible que tu ginecólogo tenga una charla contigo, igual que la tuvo conmigo.

En mi segundo embarazo tras la eco de las 12 semanas mi ginecóloga me dijo «Ojalá pudiera decirte que todo está fantástico pero tenemos que hablar de riesgos»

Los valores del pliegue nucal no estaban bien y detectaron una anomalía en su corazón.

Yo tenía 30 años y un embarazo que ya era de riesgo por culpa de una operación de vesícula y según el triple screening mi hija (entonces de sexo indeterminado aún) tenía 1 probabilidad entre 72 de padecer la Trisomía 21, Sindrome de Down.

Eso es un riesgo muy alto. El riesgo nunca es 0 pero el Síndrome de Down tiene una incidencia de 1/1100 nacimientos. En estos casos lo normal es que el ginecólogo te indique que es necesario realizar una amniocentesis.

Obviamente esta prueba es voluntaria, uno de los motivos por los que se realiza este screening en la ecografía del primer trimestre es que en el caso de que el feto tenga una patología incompatible con la vida, se podría practicar un aborto con menor riesgo para la mujer que si la gestación está más avanzada.

En mi caso no me hice la amniocentesis , por el tema de la reciente operación no era nada conveniente «pincharme» la barriga y mi ginecóloga me recomendó el cribado en sangre materna.

Photo by Pranidchakan Boonrom on Pexels. com

Un análisis diagnostico en el que analizan el ADN del feto a través de la sangre de la madre. El proceso es el de una analítica de sangre y determinan lo siguiente:

  • Analiza todos los cromosomas
  • Detecta las trisomías 21,18 y 13
  • Estudia 27 enfermedades monogénicas dominantes
  • Informa sobre:
    • El sexo fetal
    • Las aneuploidías sexuales mas comunes
    • 38 síndromes de microdeleción

Ahora creo que hay comunidades que ya lo incluyen en la seguridad social. Yo lo hice con NimGenetics , he mirado los precios actuales y ahora cuesta 575 euros a mi me costó 750. No es 100% fiable, la amniocentesis si. En todo caso arroja una probabilidad según los resultados del estudio de ADN.

En mi caso el cribado arrojó que mi hija, ahora si ya sabíamos que era niña, tenía 1 probabilidad entre 10.000.000.000 o algo por el estilo de tener cualquier trisomía.

No os voy a contar lo que me pasaba por la cabeza los 9 días que tardaron en llegar los resultados. Nadie sale de la eco de las 12 semanas pensando que se va a tener que replantear su vida entera porque es posible que su hijo no nazca sano.

No me refiero a la discapacidad intelectual, que de verdad, en mi opinión es lo de menos. Mucha gente lo desconoce pero hay trisomías muy graves. Bebés con patologías cardíacas que no sobreviven, bebés que lo hacen pero que deben someterse a innumerables operaciones a lo largo de su infancia.

En mi caso yo no paraba de pensar en esa anomalía cardíaca y respiré hondo cuando supe que no era una trisomía.

Tuvimos que descartar otras cardiopatías con un ecocardiograma fetal, resultó que efectivamente mi hija tenía una cardiopatía congenita. Tenía unos pequeños agujeros (muy pequeños) conectando las dos aurículas del corazón y por eso había un flujo inusual de sangre. En nuestro caso nos indicaron que no eran preocupantes porque eran muy pequeños y lo más seguro es que se cerrasen con el crecimiento.

Tuvimos que hacer otra eco del corazón al nacer, a los 6 meses y al año de edad para ver como progresaban.

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