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Tome ácido fólico antes de quedar embarazada
El ácido fólico es una vitamina que cada célula de su cuerpo necesita para el crecimiento y desarrollo sano. Si la toma antes y durante el comienzo del embarazo, puede ayudar a proteger a su bebé de los defectos de nacimiento del cerebro y la médula espinal llamados defectos del tubo neural.El tubo neural es la parte del bebé en desarrollo que se convertirá en el cerebro y la médula espinal. Los defectos del tubo neural suceden el primer mes de embarazo, antes de que tal vez sepa que está embarazada. Es por eso que es importante que tenga suficiente ácido fólico en el cuerpo antes de quedar embarazada.
Los defectos del tubo neural afectan a alrededor de 3,000 embarazos todos los años en los Estados Unidos. Si todas las mujeres toman 400 microgramos (también llamado mcg) de ácido fólico todos los días antes de quedar embarazadas y durante el comienzo del embarazo, quizás se puedan prevenir hasta 7 de cada 10 (70 por ciento) de los defectos del tubo neural. Considerando que casi la mitad de todos los embarazos en los Estados Unidos no son planeados, todas las mujeres que pueden quedar embarazadas deben tomar ácido fólico todos los días.
Algunos estudios muestran que el ácido fólico también puede ayudar a prevenir defectos de nacimiento en la boca del bebé, llamados labio leporino y paladar hendido. El labio leporino es un defecto de nacimiento en el cual el labio superior del bebé no se forma por completo y tiene una abertura.
¿Cómo puede obtener suficiente ácido fólico?
Hay varias maneras de consumir suficiente ácido fólico:
Esto es lo que debe saber sobre el tomar ácido fólico para prevenir los defectos del tubo neural:
Para la mayoría de las mujeres
Para ayudar a prevenir los defectos del tubo neural, antes del embarazo tome un suplemento vitamínico con 400 mcg de ácido fólico todos los días. Un suplemento es un producto que usted toma para ayudar a obtener ciertos nutrientes que no recibe lo suficiente de los alimentos que come. Empiece a tomar 400 mcg de ácido fólico cada día al menos 1 mes antes del embarazo hasta las 12 semanas de embarazo. Su suplemento de ácido fólico puede ser:
Tome un suplemento vitamínico con 400 mcg de ácido fólico todos los días, aunque no esté intentando quedar embarazada.
Durante el embarazo, tome una vitamina prenatal con 600 mcg de ácido fólico todos los días. El ácido fólico solo funciona para prevenir los defectos del tubo neural antes y durante las primeras semanas de embarazo. Más adelante en el embarazo, usted necesita 600 mcg de ácido fólico todos los días para ayudar a su bebé a crecer y desarrollarse.
Para las mujeres con alto riesgo de defectos del tubo neural
Si usted corre alto riesgo de tener un bebé con un defecto del tubo neural, tome 4,000 mcg de ácido fólico cada día para ayudar a prevenir ese defecto. Empiece a tomar 4,000 mcg de ácido fólico 3 meses antes de quedar embarazada hasta las 12 semanas de embarazo. Usted tiene un alto riesgo si:
Los estudios muestran que tomar 4,000 mcg de ácido fólico antes y durante el comienzo del embarazo puede ayudar a reducir su riesgo de tener otro bebé con un defecto del tubo neural en alrededor de un 70 por ciento. Pregunte a su profesional médico cómo obtener esta cantidad de ácido fólico de forma segura. No es seguro tomar varias multivitaminas o vitaminas prenatales porque usted puede obtener demasiado de otros nutrientes que pueden ser perjudiciales para su salud. Su profesional puede ayudarla a determinar la manera más segura de obtener la cantidad correcta de ácido fólico.
También puede obtener ácido fólico de los alimentos. Algunos alimentos están fortificados con ácido fólico. Fortificado significa que el ácido fólico ha sido añadido al alimento. Lea la etiqueta del producto para ver la cantidad de ácido fólico en cada porción. Busque las palabras “fortificado” o “enriquecido” (“fortified” o “enriched” en inglés) en las etiquetas de alimentos como:
Algunas frutas y vegetales son buenas fuentes de ácido fólico. Cuando el ácido fólico se presenta naturalmente en los alimentos, se le llama “folato”. Los alimentos que son una buena fuente de folato son:
Es difícil ingerir todo el ácido fólico que necesita de los alimentos. Aunque coma alimentos con ácido fólico, tome su suplemento vitamínico todos los días también.
Para encontrar si un suplemento vitamínico contiene ácido fólico, revise la etiqueta (también llamada datos del suplemento). Por lo general, la etiqueta se encuentra en la parte trasera del frasco. Busque la palabra “folato” (“folate” en inglés) en la etiqueta para ver la cantidad de ácido fólico que recibe. La etiqueta le brinda la siguiente información:
Las etiquetas de los suplementos vitamínicos ahora ofrecen nueva información sobre el ácido fólico. En el pasado, solo ofrecían los microgramos de ácido fólico. Ahora ofrecen “mcg DFE de folato” (“mcg DFE of folate” en inglés). Por ejemplo, para el folato usted verá “400 mcg DFE.” DFE se refiere al equivalente dietético de folato. Es la cantidad de folato que su cuerpo absorbe. Si una ración tiene menos de 400 mcg DFE, usted necesita más de una ración para obtener todo el ácido fólico que necesita a diario.
Las etiquetas de los productos de alimentos no siempre indican la cantidad de ácido fólico en el producto. Nueva etiquetas de alimentos que incluyen ácido fólico indicarán los mcg DFE de folato, al igual que los suplementos vitamínicos.
Sí. Si usted tiene una variante MTHFR, tomar 400 mcg de ácido fólico todos los días antes y temprano en el embarazo puede ayudar a prevenir defectos del tubo neural en su bebé.
MTHFR se refiere a la reductasa metilentetrahidrofolato. Es una enzima (proteína) que ayuda a su cuerpo a descomponer y usar el folato. Una variante de MTHFR (llamada MTHFRTT o genotipo CT) es un cambio en el gen MTHFR en su cuerpo que hace que su cuerpo use el folato de forma más lenta que lo usual. Los genes son partes de las células de su cuerpo que almacenan las instrucciones de cómo crece y funciona su cuerpo. Las variantes MTHFR son hereditarias (se pasan de padres a hijos) a través de los genes. Si usted sabe que tiene una variante MTHFR o piensa que es algo que corre en su familia, hable con su profesional de la salud.
Es posible que su profesional de la salud le haga una prueba para determinar la presencia de una variante MTHFR si tiene niveles altos de una sustancia en su cuerpo llamada homocisteína. Demasiada homocisteína en su sangre puede causar condiciones del corazón, coágulos de sangre y derrame cerebral (accidente cerebrovascular). Usted puede averiguar sus niveles de homocisteína a tavés de un análisis de sangre. Si sus niveles son altos, se le puede hacer una prueba genética (prueba para revisar sus genes) para determinar si tiene una variante MTHFR. La prueba genética detecta cambios en los genes que pueden causar defectos de nacimiento u otros problemas médicos.
Quizás haya escuchado que no debe tomar ácido fólico si tiene una variante MTHFR, porque puede aumentar su riesgo de complicaciones en el embarazo y de problemas de salud en su bebé. Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés) recomiendan que todas las mujeres consuman 400 mcg de ácido fólico a diario antes y temprano en el embarazo. Si usted tiene una variante MTHFR, hable con su profesional de la salud.
Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades
Hoja de acción de salud sobre el ácido fólico
Revisado en mayo de 2020
© , March of Dimes Foundation, una fundación sin fines de lucro Normas de privacidad, Términos de uso
El ácido fólico ayuda a prevenir los defectos de nacimiento en el tubo neural disminuyendo el riesgo de que el feto presente problemas en el desarrollo de su médula espinal y su cerebro. Algunos estudios sugieren que tomar suficiente ácido fólico en el embarazo también reduce significativamente la aparición de labio leporino, fisura palatina y ciertas patologías del corazón.
Los defectos del tubo neural se producen como consecuencia de alteraciones en la configuración física del bebé durante la primera etapa de la gestación. Sus efectos son muy negativos e irreversibles, y pueden llegar a poner en riesgo el embarazo.
Los defectos en el tubo neuronal pueden ser de dos tipos:
En los casos más graves puede producirse espina bífida aislada, un diagnóstico cuyas consecuencias clínicas son graves: apenas una pequeña parte de los afectados por esta anomalía consiguen llegar a la edad adulta y, cuando lo hacen, sufren parálisis permanente en miembros inferiores además de un grado variable de incontinencia urinaria y fecal.
A nivel global se estima que los defectos del tubo neural afectan a entre 1 y 8 de cada 10.000 nacidos. El riesgo aumenta cuando hay:
En todos los casos, el consumo de ácido fólico en el embarazo y antes del mismo se ha desvelado como una de las mejores formas para prevenir los defectos del tubo neuronal.
El ácido fólico (también ácido pteroilglutámico, vitamina B9 o folato) es una vitamina hidrosoluble del grupo B sintetizada por las bacterias de la flora intestinal. Está presente en cantidades muy pequeñas en algunos alimentos y entre sus funciones esenciales destaca su papel en:
El ácido fólico también contribuye al mantenimiento y la creación de nuevas células, especialmente glóbulos rojos, ayudando a prevenir enfermedades como la anemia.
La deficiencia de ácido fólico en el embarazo puede dificultar la síntesis y la división celular repercutiendo directamente en la médula espinal, que es donde se forman las células sanguíneas. Puesto que la formación del tubo neural del feto se produce durante las cuatro primeras semanas de la gestación, muchas mujeres no saben todavía que están embarazadas. De ahí la importancia de aumentar el consumo de ácido fólico en el embarazo pero también antes de éste.
El ácido fólico se encuentra de forma natural en verduras, frutas y legumbres, y también en los cereales y en el pan. Algunos alimentos ricos en esta vitamina son:
Aunque la carne no es especialmente rica en ácido fólico, algunas vísceras como el hígado de ternera tienen una dosis elevada de este nutriente. Sin embargo, y a modo preventivo, el consumo de este tipo de alimentos debe ser limitado para las embarazadas.
Aunque a priori la cantidad necesaria de ácido fólico en el embarazo podría cubrirse a través de:
Un ejemplo práctico: las verduras pueden perder hasta el 80% de su ácido fólico cuando se cuecen. A este hecho se suma que los folatos naturales se absorben peor (una media del 50%) que los “artificiales” (en forma de pastillas). Por eso es habitual que los médicos recomienden la toma de suplementos alimenticios para garantizar la ingesta de ácido fólico antes, durante y después de la gestación.
Las sociedades científicas recomiendan el inicio en el consumo de ácido fólico a todas las parejas que estén planeando un embarazo (mujeres y hombres por igual) tres meses antes de la concepción.
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Normalmente los médicos aconsejan el consumo de complementos vitamínicos de 400 microgramos de ácido fólico diarios, generalmente por la mañana y en ayunas. A esto habría que añadir una dieta saludable que introduzca su consumo a través de frutas y verduras. En el caso de los suplementos alimenticios, el cuerpo absorbe el 100% de la vitamina así que esta cantidad junto con la proporcionada por una dieta rica en folatos nos aportará suficiente cantidad de ácido fólico para el embarazo.
El tiempo recomendado del uso de la suplementación de ácido fólico es tres meses antes de la concepción y hasta finalizada la semana 12 de embarazo, que corresponde con la semana 14 desde la fecha de la última regla. Las excepciones estarán marcadas por las indicaciones clínicas del médico según cada paciente, y en algunos casos puede recomendarse su consumo durante todo el embarazo e incluso en la lactancia.
Por último, si la mujer ha tenido con anterioridad un embarazo con defectos en el tubo neural debe consultar con su médico cuál es la cantidad de ácido fólico recomendada en el embarazo en su caso. Lo mismo ocurre si sufre diabetes, epilepsia u obesidad, ya que el riesgo de que su bebé nazca con defectos en el tubo neural es más elevado.
Los defectos en el tubo neuronal no son los únicos problemas de desarrollo a los que se enfrenta nuestro bebé. Por suerte, en la actualidad existen pruebas de cribado prenatal no invasivas que permiten conocer, desde la semana 10 de la gestación, si existe alguna anomalía cromosómica en el feto.