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Recibir buen cuidado antes, durante y después de su embarazo es muy importante. Puede ayudar a su bebé a crecer y desarrollarse, y a mantenerlos a ambos saludables. Es la mejor manera de asegurar que su pequeño tenga un buen inicio para una vida saludable.
CUIDADO PRENATAL
Un buen cuidado prenatal incluye una buena alimentación y buenos hábitos de salud antes y durante el embarazo. Idealmente, usted debe hablar con su proveedor de atención médica antes de empezar a intentar quedar embarazada. He aquí algunas cosas que deberá hacer:
Elegir a un proveedor: Será necesario que elija un proveedor para su embarazo y parto. Este proveedor le ofrecerá servicios de cuidado prenatal, de parto y de posparto.
Tomar ácido fólico: Si está contemplando quedar embarazada, o si ya lo está, debe tomar un suplemento con al menos 400 microgramos (0.4 mg) de ácido fólico todos los días. Tomar ácido fólico reducirá el riesgo de ciertos defectos congénitos. Las vitaminas prenatales casi siempre contienen más de 400 microgramos (0.4 mg) de ácido fólico por cápsula o tableta.
También debería:
Asistir a consultas y exámenes prenatales: Usted visitará muchas veces a su proveedor durante el embarazo para recibir cuidado prenatal. La cantidad de visitas y los tipos de exámenes que se le harán cambiarán según en qué punto de su embarazo se encuentre:
Hable con su proveedor sobre los distintos exámenes que se le practicarán durante el embarazo. Estos exámenes pueden ayudar a su proveedor a ver cómo se está desarrollando el bebé y a detectar cualquier problema con su embarazo. Los exámenes pueden incluir:
Según sus antecedentes familiares, puede elegir hacerse pruebas de detección de problemas genéticos. Hay muchas cosas que debe pensar antes de realizar pruebas genéticas. Su proveedor puede ayudarle a decidir si esto es lo mejor para usted.
Si usted tiene un embarazo de alto riesgo, podría ser necesario que consulte a su proveedor con mayor frecuencia, y que se realice exámenes adicionales.
QUÉ ESPERAR DURANTE EL EMBARAZO
Su proveedor hablará con usted sobre cómo manejar las molestias comunes del embarazo como lo son:
No hay dos embarazos iguales. Algunas mujeres tienen síntomas leves, o muy pocos síntomas durante el embarazo. Muchas mujeres trabajan durante todo el término y viajan mientras están embarazadas. Otras podrían necesitar disminuir sus horas o dejar de trabajar. Algunas mujeres requieren reposo en cama durante algunos días o posiblemente semanas para tener un embarazo saludable.
POSIBLES COMPLICACIONES DEL EMBARAZO
El embarazo es un proceso complejo. Si bien muchas mujeres tienen embarazos normales, pueden presentarse complicaciones. Sin embargo, presentar una complicación no quiere decir que no tendrá un bebé saludable. Más bien, significa que su proveedor la vigilará de cerca y cuidará especialmente de usted y de su bebé durante el resto de su término.
Las complicaciones comunes incluyen:
Pensar en los posibles problemas puede ser atemorizante. Pero es importante estar al tanto de manera que pueda informar a su proveedor si nota síntomas inusuales.
TRABAJO DE PARTO Y ALUMBRAMIENTO
Hable con su proveedor sobre lo que puede esperar durante el trabajo de parto y el alumbramiento. Puede comunicar sus deseos preparando un plan de parto. Hable con su proveedor sobre lo que debe incluir en su plan de parto. Puede querer incluir cosas como:
También es buena idea hacer una lista de las cosas que debe llevar al hospital. Empaque una maleta con anticipación para tenerla lista cuando comience el trabajo de parto.
Conforme se acerque la fecha esperada para el parto, notará ciertos cambios. No siempre es fácil notar cuándo comenzará el trabajo de parto. Su proveedor podrá decirle cuándo es momento de visitarlo para hacerse un examen o dirigirse al hospital para el parto.
Hable con su proveedor sobre lo que sucede si supera la fecha esperada de parto. Según su edad y factores de riesgo, su proveedor podría tener que provocar el parto entre la semana 39 y la semana 42, aproximadamente.
Una vez que comienza el trabajo de parto, puede utilizar una serie de estrategias para sobrellevarlo.
QUÉ ESPERAR LUEGO DEL NACIMIENTO DE SU BEBÉ
Tener un bebé es un hecho emocionante y maravilloso. También implica mucho trabajo para la madre. Usted necesitará cuidarse en las primeras semanas luego del alumbramiento. El tipo de cuidado que necesitará dependerá de cómo dio a luz a su bebé.
Si tuvo un parto vaginal, probablemente pasará 1 o 2 días en el hospital antes de irse a casa.
Si tuvo una cesárea se quedará en el hospital por 2 o 3 días antes de irse a casa. Su proveedor le explicará cómo cuidarse usted sola cuando regrese a casa conforme se recupera.
Si usted es capaz de amamantar, hacerlo tiene muchos beneficios. También puede ayudarle a perder el peso que subió durante el embarazo.
Téngase paciencia mientras aprende a amamantar. Aprender las habilidades necesarias para amamantar a su bebé puede llevar de 2 a 3 semanas. Hay mucho que aprender, como:
Si necesita ayuda, hay muchos recursos disponibles para las madres primerizas.
CUÁNDO LLAMAR AL PROVEEDOR DE ATENCIÓN MÉDICA:
Llame a su proveedor si está o cree que está embarazada y:
Consulte a su proveedor inmediatamente si está embarazada y tiene:
Greenberg JM, Haberman B, Narendran V, Nathan AT, Schibler K. Neonatal morbidities of prenatal and perinatal origin. In: Resnik R, Lockwood CJ, Moore TR, Greene MF, Copel JA, Silver RM, eds. Creasy and Resnik’s Maternal-Fetal Medicine: Principles and Practice. 8th ed. Philadelphia, PA: Elsevier; 2019:chap 73.
Gregory KD, Ramos DE, Jauniaux ERM. Preconception and prenatal care. In: Landon MB, Galan HL, Jauniaux ERM, et al, eds. Gabbe’s Obstetrics: Normal and Problem Pregnancies. 8th ed. Philadelphia, PA: Elsevier; 2021:chap 5.
Magowan BA, Owen P, Thomson A. Early pregnancy care. In: Magowan BA, Owen P, Thomson A, eds. Clinical Obstetrics and Gynaecology. 4th ed. Philadelphia, PA: Elsevier Ltd.; 2019:chap 6.
Williams DE, Pridjian G. Obstetrics. In: Rakel RE, Rakel DP, eds. Textbook of Family Medicine. 9th ed. Philadelphia, PA: Elsevier; 2016:chap 20.
Versión en inglés revisada por: John D. Jacobson, MD, Department of Obstetrics and Gynecology, Loma Linda University School of Medicine, Loma Linda, CA. Also reviewed by David Zieve, MD, MHA, Medical Director, Brenda Conaway, Editorial Director, and the A.D.A.M. Editorial team.
Traducción y localización realizada por: DrTango, Inc.
En esta sección:
Tener un bebé es una etapa muy emocionante que a menudo inspira a las mujeres a elegir un estilo de vida más saludable y, si es necesario, a trabajar para lograr un peso corporal sano. Aquí encontrará recomendaciones sobre cómo mejorar sus hábitos alimenticios y de actividad física durante el embarazo y después del nacimiento de su bebé.
Estas recomendaciones también pueden ser útiles si no está embarazada, ¡pero está pensando en tener un bebé! Al hacer cambios ahora, puede acostumbrarse a nuevos hábitos de estilo de vida, le dará a su bebé el mejor comienzo posible en la vida y será un ejemplo de salud para su familia de por vida.
Mantenerse activa durante el embarazo puede ayudarle a tener un embarazo sano.
Aumentar una cantidad adecuada de peso durante el embarazo ayuda a que el bebé alcance un tamaño saludable. Sin embargo, aumentar demasiado o muy poco peso podría causar problemas de salud graves para usted y el bebé.
Según los expertos (en inglés), aumentar demasiado de peso durante el embarazo incrementa su probabilidad de desarrollar diabetes gestacional (diabetes durante el embarazo) y presión arterial alta durante el embarazo. También incrementa su riesgo de diabetes tipo 2 e hipertensión arterial más adelante. Si tiene sobrepeso o tiene obesidad cuando queda embarazada, su probabilidad de presentar problemas de salud puede ser aún mayor. También es más probable que necesite una cesárea.
Aumentar una cantidad saludable de peso ayuda a tener un embarazo y un parto más fáciles. También podría ayudarle a recuperar un peso saludable después del parto. Las investigaciones demuestran que las cantidades recomendadas de aumento de peso durante el embarazo también pueden reducir la probabilidad de que usted o su hijo tengan obesidad y problemas relacionados con el peso más adelante.
La cantidad de peso que debe aumentar depende de su índice de masa corporal (IMC) antes del embarazo. El IMC es una medida con base en su peso en relación con su estatura. Puede usar una herramienta en línea para calcular su IMC.
La siguiente recomendación general sobre el aumento de peso es para las mujeres que están embarazadas con un solo bebé.
Si:1 | Debería aumentar unas: |
---|---|
Está bajo de peso (IMC por debajo de 18.5) | 28 a 40 libras |
Está en un peso saludable (IMC entre 18.5 y 24. 9) | 25 a 35 libras |
Está con sobrepeso (IMC de 25 a 29.9) | 15 a 25 libras |
Tiene obesidad (IMC por encima de 30) | 11 a 20 libras |
Es importante aumentar de peso muy lentamente. El viejo mito de que está “comiendo por dos” no es cierto. Durante los primeros 3 meses, el bebé es apenas del tamaño de una nuez y no necesita muchas calorías adicionales. Se aconseja la siguiente tasa de aumento de peso:
Consulte con su profesional de atención médica acerca de cuánto peso debería aumentar. Trabajen juntos para establecer metas para su aumento de peso teniendo en cuenta su edad, peso al quedar embarazada y salud general. Lleve un registro de su peso en casa o cuando vaya a consulta con su profesional de atención médica.
No trate de adelgazar si está embarazada. Su bebé necesita estar expuesto a alimentos saludables y bebidas bajas en calorías (particularmente agua) para crecer adecuadamente. Algunas mujeres podrían perder una pequeña cantidad de peso al comienzo del embarazo. Consulte con su profesional de atención médica si es su caso.
El consumo de alimentos saludables y bebidas bajas en calorías, en particular agua, y la cantidad adecuada de calorías puede ayudarles a usted y a su bebé a aumentar la cantidad adecuada de peso.
La cantidad de alimentos y las calorías que necesita depende de factores como su peso antes del embarazo, su edad y la rapidez con la que aumenta de peso. Si tiene un peso sano, los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) (en inglés) indican que no necesita calorías adicionales en el primer trimestre, aproximadamente 340 calorías adicionales al día en el segundo trimestre y aproximadamente 450 calorías adicionales al día en el tercer trimestre. 1 Es posible que tampoco necesite calorías adicionales durante las últimas semanas de embarazo.
Consulte con su profesional de atención médica sobre su aumento de peso. Si no está aumentando el peso necesario, es posible que le aconseje que ingiera más calorías. Si está aumentando demasiado de peso, es posible que deba reducir las calorías. Cada mujer tiene necesidades diferentes. Sus necesidades específicas también dependen de si tenía bajo peso, sobrepeso o estaba obesa antes de quedar embarazada, o si tiene un embarazo múltiple.
Un plan de alimentación saludable para el embarazo incluye alimentos y bebidas ricos en nutrientes. Las Pautas dietéticas para estadounidenses 2020–2025 (en inglés) recomiendan estos alimentos y bebidas todos los días:
Un plan de alimentación saludable también limita la sal y las grasas sólidas (como mantequilla, manteca de cerdo y manteca vegetal), y los alimentos y bebidas endulzados con azúcar.
Las frutas, las verduras de colores, los frijoles, el pescado y los productos lácteos bajos en grasa son fuentes ricas en nutrientes necesarios durante el embarazo.
¿Está su plan de alimentación a la altura? ¿Cómo puede mejorar sus hábitos? Trate de consumir frutas como frutos rojos o un plátano con cereal caliente o frío para el desayuno; una ensalada con frijoles o tofu u otra proteína que no sea carne para el almuerzo y una ración magra de carne, pollo, pavo o pescado y verduras al vapor para la cena. Piense en alimentos y bebidas nuevos y saludables que pueda probar. Escriba sus ideas y compártalas con su profesional de atención médica.
Para obtener más información sobre la alimentación saludable, visite Mi plato: lista de verificación diaria (en inglés). Está página puede ayudarle a hacer un plan de alimentación para cada trimestre (3 meses) de su embarazo.
Una comida de verduras al vapor y pechuga de pollo a la parrilla contiene nutrientes sin demasiadas calorías.
Un plan de alimentación vegetariano durante el embarazo puede ser saludable. Considere la calidad de su plan de alimentación y consulte con su profesional de atención médica para asegurarse de que está consumiendo suficiente calcio, hierro, proteínas, vitamina B12, vitamina D y otros nutrientes necesarios. Su profesional de atención médica podría además indicarle que tome vitaminas y minerales que le ayudarán a satisfacer sus necesidades.
Sí. Durante el embarazo, necesita más vitaminas y minerales como ácido fólico, hierro y calcio.
Es muy importante obtener la cantidad adecuada de ácido fólico. El folato, una vitamina B también conocida como ácido fólico, podría ayudar a prevenir defectos de nacimiento. Antes del embarazo, necesita 400 mcg por día de suplementos o alimentos fortificados, además del folato que obtiene naturalmente de los alimentos y bebidas. Durante el embarazo, necesita 600 mcg. Mientras amamanta, necesita 500 mcg de ácido fólico por día.2 Los alimentos con alto contenido de ácido fólico incluyen jugo de naranja, fresas, espinacas, brócoli, frijoles, panes fortificados y cereales para el desayuno fortificados y con bajo contenido de azúcar. Estos alimentos pueden incluso brindarle el 100% del valor diario de ácido fólico por porción.
La mayoría de los profesionales de atención médica les recomiendan a las mujeres embarazadas que tomen una vitamina prenatal todos los días y que consuman alimentos, meriendas y bebidas saludables. Consulte con su médico sobre lo que debería tomar.
El embarazo puede generar nuevas inquietudes sobre las comidas, las bebidas y la alimentación. Estas recomendaciones pueden ayudarla a satisfacer las necesidades de su cuerpo y a sentirse más cómoda. Consulte con su profesional de atención médica si tiene alguna inquietud.
Los alimentos ricos en fibra como los frijoles ayudan a prevenir el estreñimiento durante el embarazo.
Ciertos alimentos y bebidas pueden ser nocivos para el bebé si los ingiere durante el embarazo. He aquí una lista de cosas que debe evitar.
Casi todas las mujeres pueden y deben hacer actividad física durante el embarazo. Según las pautas actuales (PDF, 14.5 MB) (en inglés), la actividad física regular podría:
También existen algunas pruebas de que la actividad física podría reducir el riesgo de problemas durante el embarazo como la preeclampsia (presión arterial alta durante el embarazo), reducir la duración del trabajo de parto y la recuperación posparto, y reducir el riesgo de necesitar una cesárea.
Si era físicamente activa antes de quedar embarazada, es posible que no necesite cambiar sus hábitos de ejercicio. Consulte con su profesional de atención médica sobre cómo cambiar su rutina de ejercicio durante el embarazo.
Mantenerse físicamente activa puede ser difícil si no tiene quien cuide a sus otros hijos, no ha hecho ejercicio antes o no sabe qué hacer. Siga leyendo para obtener recomendaciones sobre cómo puede sortear estos obstáculos y mantenerse físicamente activa.
Casi todas las mujeres pueden y deben hacer actividad física durante el embarazo.
Según las pautas actuales (PDF, 14.5 MB) (en inglés), la mayoría de las mujeres necesitan la misma cantidad de actividad física que antes de quedar embarazadas. Trate de hacer al menos 150 minutos a la semana de actividad aeróbica de intensidad moderada. Las actividades aeróbicas, también conocidas como actividades de resistencia o de cardio, usan los grandes grupos musculares (pecho, piernas y espalda) para acelerar la frecuencia cardíaca y la respiración. Caminar a paso ligero es una forma de actividad aeróbica.
¿Cómo puede saber si está haciendo una actividad aeróbica de intensidad moderada? Haga la “prueba oral” para averiguarlo. Si respira con dificultad, pero puede mantener fácilmente una conversación y no puede cantar, entonces su grado de actividad es de intensidad moderada.
Si solo puede decir algunas palabras antes de hacer una pausa para respirar, entonces su grado de actividad es de intensidad vigorosa. Si tenía el hábito de hacer una actividad aeróbica de intensidad vigorosa o se mantenía físicamente activa antes del embarazo, entonces probablemente está bien que continúe con estas actividades durante el embarazo.
Puede consultar con su profesional de atención médica acerca de cómo ajustar su actividad física mientras está embarazada. Si tiene problemas de salud como obesidad, presión arterial alta, diabetes o anemia (muy pocos glóbulos rojos sanos), consulte con su profesional de atención médica sobre un grado de actividad que sea seguro para usted y para el bebé por nacer.
Incluso si no se ha mantenido activa antes, puede mantenerse activa durante el embarazo. He aquí algunas recomendaciones:
Por su salud y seguridad, y por la de su bebé, no debe hacer ciertas actividades físicas durante el embarazo. He aquí algunas de ellas. Consulte con su profesional de atención médica sobre otras actividades físicas que no debería hacer.
El yoga prenatal puede ser parte de su plan de actividades y podría reducir los dolores de espalda.
Siga estas recomendaciones de seguridad mientras está activa durante el embarazo.
Debe… | No debe… |
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Elegir actividades moderadas que probablemente no le hagan daño, como caminar o hacer ejercicios aeróbicos en el agua o en una silla. | Hacer deportes en los que podría caerse o lesionarse el abdomen, como fútbol o baloncesto. |
Tomar líquidos antes, durante y después de hacer actividad física. No se exceda. | Hacer ejercicio enérgico al aire libre en días muy calurosos. |
Usar ropa cómoda que le quede bien y que sujete y proteja sus senos. | Usar baños de vapor, jacuzzis ni saunas. |
Dejar de hacer ejercicio si se siente mareada, con dificultad para respirar, cansada o con malestar estomacal. | Hacer ejercicios que requieran que se acueste boca arriba después de la semana 12 de embarazo. |
Después de dar a luz, su salud podría mejorar si intenta volver lentamente a un peso sano. No perder el peso que aumentó en el embarazo podría causarle sobrepeso u obesidad más adelante. Volver lentamente a un peso sano podría reducir su probabilidad de desarrollar diabetes, enfermedades cardíacas y otros problemas relacionados con el peso.
La alimentación saludable, la actividad física regular, el buen dormir y otros hábitos saludables después del parto podrían ayudarle a volver a tener un peso sano y darle energía.
Después de que nazca el bebé:
Además, la actividad física no parece tener efectos negativos sobre la cantidad y el contenido de la leche materna que se produce o el crecimiento del bebé.
Amamantar podría o no facilitarle la pérdida de peso porque el cuerpo usa calorías adicionales para producir leche. Incluso si la lactancia materna no le ayuda a perder peso, está relacionada con muchos otros beneficios para la madre y el niño.
Para las madres que amamantan, los expertos aconsejan (en inglés) alimentar a sus bebés solo con leche materna durante los primeros 6 meses, sin otros alimentos o bebidas durante este tiempo. Los expertos sugieren que esas mujeres continúen amamantando al menos hasta que el bebé cumpla los 12 meses.
Las necesidades calóricas durante la lactancia dependen de la cantidad de grasa corporal que tenga y de su grado de actividad. Consulte con su un profesional de atención médica sobre sus necesidades calóricas mientras está amamantando.
Beneficios de la lactancia materna. Amamantar al bebé:
La lactancia trae muchos beneficios tanto a la madre como al bebé.
El embarazo y el periodo posterior al parto pueden ser maravillosos, emocionantes, emotivos, estresantes y agotadores, todo a la vez. Estos sentimientos podrían hacer que coma en exceso, que no obtenga suficientes calorías o que pierda el impulso y la energía. Ser buena consigo misma podría ayudarle a sobrellevar sus sentimientos y a seguir hábitos de vida saludables.
He aquí algunas ideas que podrían ayudar.