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El té verde en el embarazo tiene más desventajas que ventajas debido a que contiene cafeína dentro de sus componentes. Antes de consumirlo, es fundamental consultar con el médico.
Escrito por Equipo Editorial
Última actualización: 07 octubre, 2022
Siempre se han presentado dudas respecto a tomar té verde en el embarazo, principalmente, porque este contiene cafeína entre las propiedades que lo componen. Al ser la cafeína un riesgo durante la etapa de gestación, muchas veces se recomienda un bajo consumo e incluso, no hacerlo.
Sin embargo, la ingesta de té verde durante la gestación también puede acarrear ciertos beneficios para la salud de la madre y del bebé. ¿Deseas saber más acerca del tema? ¡Sigue leyendo!
Consumir cafeína en grandes cantidades durante el embarazo es un riesgo para el bebé, por lo que, en caso de tomar té verde, debe ser de 25 a 50 mg por taza, y esto dependerá del tiempo que se deje en infusión. Además, siempre se debe consultar con el médico.
Lo cierto es que el té verde tiene muchas más desventajas que ventajas durante la etapa de gestación debido, principalmente, a sus niveles de cafeína, los cuales pueden ser notablemente perjudiciales para el bebé. Lo explicaremos en detalle:
Según algunas investigaciones llevadas a cabo por la Universidad de Granada, un 95 % de las mujeres embarazadas toman en algún momento de su embarazo preparados con cafeína.
Algunos tés suelen ser menos recomendables que otros durante el embarazo. Generalmente, este tipo de bebida se conoce por sus múltiples beneficios para la salud, pero, durante la etapa de gestación, la cafeína se puede convertir en un problema que puede perjudicar al bebé. Por ello, a continuación, explicaremos cuáles tés no son recomendables durante el embarazo:
Este tipo de té contiene un componente llamado tujona, el cual se considera que puede estimular el útero y provocar abortos espontáneos, así como hipertensión arterial.
Aunque este tipo de té es conocido porque ayuda a conciliar el sueño, puede ser perjudicial en el embarazo según una publicación de la revista Phytotherapy Research. En caso de estar tomando té de valeriana, es fundamental que consultes con el médico.
Este té tiene múltiples beneficios en el cuerpo, incluso en el embarazo, debido a que ayuda a combatir el insomnio, las náuseas y los problemas digestivos. Aun así, no es recomendable debido a que puede causar problemas circulatorios en el bebé.
El eucalipto puede ser realmente beneficioso para tratar problemas respiratorios, pero, cuando se trata del embarazo, lo más recomendable es evitarlo. Esto debido a que puede causar náuseas, diarrea o vómitos.
Cuando se consume este tipo de té en grandes cantidades, puede ser perjudicial durante el embarazo. Este puede afectar el desarrollo adecuado del bebé, incluso, en muchos casos, puede provocar aborto espontáneo.
El ruibarbo es una planta que estimula el movimiento de los músculos lisos de los órganos, como es el caso del estómago, el hígado y los intestinos. Además, puede tener efectos abortivos debido a que provoca contracciones uterinas muy fuertes. Es uno de los más peligrosos.
poleo menta
Otro de los tés que se consideran más peligrosos en el embarazo es el té de poleo menta. Esto es debido a que, al consumirlo, el bebé podría sufrir malformaciones.
El té verde tiene muchos beneficios para el cuerpo y la salud, pero, al tener cafeína, puede ser perjudicial durante el embarazo, por lo que se recomienda ingerir muy poca cantidad. Además, siempre se debe consultar con el médico antes de hacerlo.
La cantidad ideal de té verde diario es de tan solo una taza después del primer trimestre. Recordemos que la dosis máxima de cafeína diaria recomendada para una mujer embarazada es de 200 miligramos, y este té aporta un máximo de 50 miligramos por taza.
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A diferencia de los medicamentos, que son investigados en profundidad y en base a esas investigaciones se consideran aptos o no para su utilización en la embarazada, las infusiones de hierbas no se someten a estudios suficientes como para inclinar la balanza hacia uno u otro lado, por lo que se desconocen los efectos secundarios que pudieran causar y/o su seguridad durante el embarazo. Entonces, ¿es seguro tomar té verde en el embarazo?
Los tés, ya sean negro, verde o rojo, al igual que el café son las infusiones más estudiadas, ya que son las más consumidas. Estas bebidas se caracterizan por contener cafeína, aproximadamente unos 25-50mg por taza en el caso del té, dependiendo del tiempo que se deje en infusión.
Los estudios realizados en mujeres embarazadas ponen de manifiesto que superando los 200mg de cafeína diarios aumenta también el riesgo de aborto y parto prematuro, por lo que no se recomienda superar esa dosis. La cafeína también es diurética, por lo que puede conducir a la deshidratación si la embarazada no ingiere suficiente agua a través de la dieta. Además, un consumo excesivo de cafeína puede poner el hígado en una situación comprometida, ya que realiza más funciones durante el embarazo que en condiciones normales, y puede estresarse y sobrecargarse al tener que procesar cantidades altas de esta sustancia.
Consumos elevados de té verde se han relacionado con bebés nacidos con defectos del tubo neural, como espina bífida, ya que el té verde dificulta la absorción de ácido fólico. Dado que esta vitamina es extremadamente importante durante las primeras 12 semanas –y las previas al embarazo para mantener los depósitos de ácido fólico llenos-, conviene limitar su consumo al menos durante los 3 primeros meses de embarazo. También dificulta la absorción de hierro no hemo, lo cual puede traducirse en un problema si la futura mamá sigue una dieta vegetariana o si está predispuesta a padecer anemia, sobre todo en el tercer trimestre del embarazo.
Otra de las desventajas del té verde es que, al contener cafeína, es un estimulante, y, si bien en condiciones normales puede no ser un problema, hacia el final del embarazo, cuando aparecen las dificultades para conciliar el sueño, puede ser conveniente disminuir la dosis. En comparación con el té negro, el té verde contiene una cantidad de cafeína levemente inferior, por lo que, desechando parte del agua de la primera infusión, en la que más cafeína se libera, podría decirse que apenas contiene esta sustancia.